Usualmente lo que se suele ver en la páginas web son quejas sobre servicios técnicos de la marca X. Yo también los he sufrido, muchas veces te preguntas como alguna empresa contrata a semejantes ineptos para atender a sus clientes en una ciudad X. Pero hoy, voy a hablar de todo lo contrario, de algo que me ha sorprendido bastante.
A principios de Septiembre del año pasado me compré un iPod (el de cuarta generación), del cual estoy bastante contento. Dicho cacharrín viene con unos auriculares, esos de color blanco que son tan fáciles de distinguir. Hace un par de meses, dichos auriculares se me han empezado a romper, básicamente en el punto donde el cable se separa en dos, uno para cada oreja. Yo no le di más importancia, ese tipo de auriculares nunca me ha durado mucho, y de todas formas estoy pensando comprarme unos que me den mejor calidad de sonido (gracias a Carlos por su magnifica guía de compra).
El asunto es que un amigo mío, Nando, también le pasó lo mismo, pero el decidió llamar a Apple, y se los cambiaron. Cuando me lo contó, decidí probar suerte. Fui a la página de Apple, cubrí una serie de formularios, donde detallé mi problema. Eso fue ayer. Hoy me ha llegado el siguiente paquete:
En menos de 24 horas, Apple me ha enviado unos cascos nuevos. Son casi idénticos que los anteriores, exceptuando lo siguiente:
Se ve que el problema debe ser de diseño, puesto que a estos nuevos cascos le han añadido un trozo de plástico que evita que se ejerza fuerza a donde el cable se separa en dos, sitio donde se me había roto los primeros.
Realmente me he quedado sorprendido por el servicio, aunque de todas formas, deseo no tener que volver a usarlo ;-).
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